Guillemí Group Invitado Al Simposio De IEES 2022 “El Futuro Del Transporte Vertical En 2030”

By 15 diciembre, 2022Actualidad

EN LA BUSQUEDA DEL ASCENSOR “VERDE” 

 

Fernando Guillemí y su hija Alea, ambos socios en Guillemí Group, fueron especialmente seleccionados por el IEES a exponer las conclusiones de un trabajo que iniciaron juntos hace ya varios años, y que no tiene fecha de caducidad. El encuentro que se llevará a cabo los días 11, 12 y 13 de Diciembre de este año en Barcelona, España, reunirá, como lo viene haciendo desde 2018, lo más granado del Transporte Vertical. En esta edición se escucharán las ponencias de representantes del Lift Instituut, Efesme, Otis, Kone, y de empresarios y consultores de India, Finlandia, Singapur, Países Bajos, España y Turquía, entre otros.  La participación de Guillemí Group es la primera de una empresa argentina

 

En este simposio

 

Patrocinado por el Lift Instituut – la certificadora neerlandesa de escaleras mecánicas y ascensores, y la revista estadounidense Elevator World, el International Elevator and Escalator Symposium (IEES) ofrece la posibilidad de mantener actualizado el espíritu del transporte vertical, así como el de su industria y el de los desarrolladores, arquitectos y gerentes de mantenimiento de todo tipo de edificios. Se trata de un evento anual de nivel académico, que reúne a los expertos top a nivel global, que presentan sus trabajos de investigación, sus proyectos y nuevas ideas sobre los temas más vanguardistas de esta actividad.

 

La primera edición de IEES se lanzó en 2018 en Estambul, Turquía. Las Vegas, USA, fue el destino para el evento de 2019 en el que se hicieron 20 presentaciones provenientes de diferentes partes del mundo. Ese evento finalizó con paneles de discusión, lo que permitió una serie de intercambios muy interesantes al estilo del “brainstorming” sobre ascensores y escaleras mecánicas y cómo se ven afectados por las inspecciones y los mantenimientos.

 

La edición del IEES que se llevará a cabo en Barcelona este fin de año versará sobre “El futuro de los ascensores y escaleras mecánicas en 2030”. Y allí, como disertante exclusiva de la Argentina hablará para todos los presentes la joven Alea Guillemí, portadora de un apellido ligado a una larga tradición en la industria de la fabricación y mantenimiento de ascensores.

 

Proceso de cambio en Guillemí Group

 

Guillemí Group ha realizado en los últimos años una reconversión de la empresa tendiente a la maximización de los recursos, a la producción de un nuevo tipo de ascensor verde, reduciendo tiempos y costos. Para ello han trabajado su base filosófica, lo que explica el hecho de haber sido seleccionados e invitados por el IEES para hablar del Transporte Vertical en el año 2030. Se trata de la primera participación de una empresa argentina de ascensores en un encuentro de tan alto nivel conceptual.

 

A partir del ingreso de la joven Alea a la empresa familiar en 2016, Guillemí Group pasó por una gran transformación en sus procesos administrativos e industriales. Si bien Fernando Guillemí ya había sentado las bases de un cambio de paradigma, fue la intervención de Alea, que estudió Administración de Empresas y cursó luego una Licenciatura en Marketing, la que impulsó la automatización de los pasos comerciales e industriales que confluyen en la fabricación e instalación de los ascensores. En 2019, antes de la pandemia, se metió a fondo con el sistema contable y el de gestión propio en el que su padre, Fernando, trabajaba ya desde el año 2009. Se trataba de una linda base para ser ampliada, por su gran flexibilidad. En un pizarrón blanco del ancho de la pared, comenzó a anotar todo. Y cada proceso y cada costo fue estudiado exhaustivamente hasta darle forma al SIGECON, siglas de Sistema de Gestión y Control que consiste en el seguimiento de la operación de Ventas e Instalaciones, sistema que no para de crecer y diversificarse mes a mes, y que funciona de la siguiente manera:

 

El vendedor hace el presupuesto y eso luego se transforma en un contrato que se genera solo y lleva firma digital; luego se envía por mail al sector de facturación; allí se carga la obra con todas las características técnicas; se generan las órdenes de compras y se envían al proveedor, todo en forma automática, con lo cual se ahorran tiempo y errores.

 

Una persona hace el seguimiento minucioso de la obra civil, para ver cual tiene el pasadizo preparado y reclamar entonces que todo esté preparado para hacer la instalación. Cuando todo está verificado, se pasa al estado de apto instalación y se manda un aviso automático con los planos para que se empiece a trabajar en el ascensor que se entregará en un lapso de 15 días. Con eso se generan las etapas que el montador tiene que presentar para cobrar el trabajo. Cuando el montador pasa la última foto del trabajo realizado, se avanza automáticamente a pre entrega; en este paso un ingeniero especialista externo, audita y prueba las seguridades de la instalacion, valida el funcionamiento y confort para luego realizar la entrega definitiva. Luego se envía también automáticamente, una encuesta de satisfacción.

 

Cuando la obra de instalación se termina definitivamente, también se emite un presupuesto del abono al cliente. Si este último lo acepta, se genera un proceso similar al de la venta, es decir un contrato que se genera sólo con el alta correspondiente, en forma automática.

 

 

Ascensor disruptivo

 

Al proceso de organización y análisis de costos, le siguió una segunda etapa de cambio que es haber desarrollado un tipo de ascensor “disruptivo”, como lo califica Fernando Guillemí, por la tecnología que utiliza, la mecánica y la modalidad y además por el enfoque lateral del proceso de entregas y relación con los clientes. “Es un sistema que, como se ve, utiliza de forma muy eficiente todos los recursos humanos en todo el proceso, tanto en lo administrativo como constructivo”.

 

“Pudimos fabricar una máquina de 80 kg, bien compacta que se ubica en el pasadizo. Sabíamos que la patente de la correa plana o belt, que Otis inventó en 1999. caducaba a los 20 años, en 2019. En 2018, de viaje por el mundo fuimos a buscar la cinta y componentes para la máquina” explica Fernando Guillemí.

 

Como todos saben, la cinta de Otis consiste en cables puestos uno al lado del otro, cubiertos con un termoplástico. Como tienen 2,50 mm de diámetro permiten una polea de 100 mm. (la polea siempre debe tener un diámetro 40 veces mayor que el cable) en lugar de una de 320mm. para los clásicos cables de 8 mm, y esto redunda en un motor más chico. Y si a esto se le agrega la tecnología de imanes permanentes y gearless, la máquina es más pequeña porque tiene imanes en el rotor. “Además de ser pequeño y usar todo este sistema, decidimos con Alea hacer un equipo estandarizado, que ocupe muy poco espacio y pueda reemplazar a cualquier otro tipo de equipo.  Ya instalamos unos 60; lo tenemos homologado en CABA y en cinco municipios y estamos buscando homologarlo en otros más. A partir del nuevo Código de edificación se pueden instalar y además también está autorizada la colocación de la cinta”. Crearon un sistema en cantilever y con cinta, un equipo que según los Guillemí va a reemplazar al ascensor hidráulico y va a estar a tono con la protección del medio ambiente.

 

Protección del medio ambiente

 

En esta tercera etapa es donde se entronca la producción de Guillemí con el tema que lo desvela hace años y por el cual ambos fueron especialmente seleccionados por la IEEA a disertar por el ascensor del año 2030. Un litro del aceite mineral que utilizan los hidráulicos contamina 1 millón de litros de agua. En cada ascensor se usan 200 litros. En Argentina se instalarían, según Guillemí, unos 1200 ascensores hidráulicos por año lo cual implicaría 200.000 litros de aceite que andan dando vueltas por ahí, por año.

 

Hay una gran preocupación por la contaminación del medio ambiente, y en el consumo creciente de recursos naturales y el aumento de la huella de carbono. En las próximas décadas la energía eléctrica no será un problema, será abundante y producida por medios poco contaminantes. Por tal motivo el enfoque debe ser producir equipos utilizando la economía circular, con elementos duraderos y de baja contaminación, además de disminuir fuertemente la huella de carbono en todos los procesos de fabricación y servicios de post venta.  “Nos preocupa la enorme contaminación. Justamente estamos en la búsqueda de una ONG que nos ayude a plantar un árbol por cada ascensor vendido”.

 

A raíz de los numerosos trabajos publicados sobre el tema de la reconversión de la empresa y su concepto ecologista fue que Lift Instituut los invitó a participar con su trabajo en este encuentro anual de IEES, que se postergó de fines de diciembre del 2021 en Amsterdam, Países Bajos, para diciembre de 2022 en Barcelona. “Nos pidieron que le enviáramos un abstract, una especie de resumen, que fue aceptado muy rápidamente. Hasta el 4 de Octubre podíamos presentar un paper que debía tener 8 páginas y nosotros con tablas, diagramas y figuras, hicimos uno de 17. Nuestra presentación es de 60 slides, videos y voz en off”.

 

Claves y una incógnita en la presentación en el IEES

 

El excesivo consumo está produciendo desastres en el mundo. En sintonía con la protección del medio ambiente y en atención al cambio climático, Guillemí Group apunta con su fabricación a disminuir la huella de carbono. Junto con Alea, van a realizar una aproximación al tema pero de una manera lateral. Se abocarán principalmente a las siguientes cuestiones:

 

¿La mayor huella de carbono que generan los ascensores se debe al uso del equipo o es provocada por otros aspectos ajenos al propio ascensor?

 

¿Deberíamos preocuparnos únicamente por la huella de carbono o también podría ser que tuviéramos que eliminar en la medida de lo posible la contaminación que producen algunos tipos de ascensores?

 

¿Podríamos hacer algo para mejorar, aunque fuera un poco, la eficiencia de los recursos humanos y la fabricación sostenible de equipos?

 

La primera pregunta tiene que ver con la utilización de la energía eléctrica para el ascensor. La misma provoca una huella de carbono debido a que esa energía se produce con una matriz de generación argentina.  La matriz argentina, cuenta con energía hidráulica, atómica, térmica, eólica, solar. Pero en Argentina se utiliza mucha energía térmica que es la que produce dióxido de carbono al quemar fuel oil para generar vapor y con él mover las turbinas. Las otras energías enumeradas generan menos carbono.

 

En la matriz argentina se genera medio kilo de CO2 por kilowatt consumido. La cuenta se hace en función de los kilowatts que consume el ascensor para saber cuánta emisión hacemos por día, indirectamente.

 

Los Guillemí hicieron un estudio donde notaron que la emisión provocada por el transporte vertical en su funcionamiento es muy poca. Llegaron a la conclusión de que la huella de carbono generada por el sector de ascensores es 8 veces superior pero debido a otro motivo, que no tiene que ver en forma directa con los ascensores, pero que se relaciona con ellos y es lo que develarán en su exposición en el IEES, el próximo 13 de Diciembre a las 13.55.

 

¿Qué hiciste tú durante la pandemia mamá? Una de las cosas por lo que Alea se pudo dedicar tanto y tan bien a desarrollar y ampliar este sistema operativo tuvo que ver, paradojalmente, con la pandemia. En ese período en que el tiempo se detuvo y la gente se aisló, Alea trabajó arduamente desde Londres, Reino Unido, donde estaba en ese momento, para modernizar el sistema. Fueron 6 meses de madrugar y trabajar a full. “Yo me despierto muy temprano, mi hobby es trabajar. A las 7 de la mañana en Londres,  en Buenos Aires eran las 3, y no se podía hablar. Entonces aprovechaba esos momentos de silencio y me sentaba con la computadora y entraba al sistema y hacía pruebas y se me iban ocurriendo cosas, y mandaba mails, completamente enfocada en el trabajo.  Cuando un día sus hijos le pregunten dónde estaba y que hizo durante la pandemia, Alea les podrá contar que estaba construyendo una empresa para el futuro.

 

“Fabricamos un ascensor realmente “disruptivo”, por la tecnología que utiliza, la mecánica y la modalidad, y además, por el enfoque lateral de proceso de entregas y de la relación con los clientes. Un sistema con un eficiente aprovechamiento de los recursos humanos, tanto en lo administrativo como constructivo”.