VENTA + ASESORAMIENTO
Con todo el expertise de años en el ramo de la distribución de los componentes de ascensor y su mantenimiento, Esteban López y Daniel Guerriero inauguraron OSLO Ascensores y Componentes el pasado 3 de agosto.
OSLO no es en este caso el nombre de la capital de Noruega, sino el homenaje de Esteban a su padre Osvaldo López, el veterano partista titular de la ex QLD, empresa donde aprendió desde muy niño todo lo que sabe sobre la fabricación y diseño de ascensores que hoy se venden en OSLO.
Daniel Guerriero dejó en agosto de este año su empresa después de 29 años de actividad, mientras Esteban López trabajó los últimos tiempos en una importante empresa del gremio, donde estaba a cargo de todo lo que allí se fabricaba.
UN DIFERENCIAL
Daniel Guerriero, un ex empresario del mantenimiento de ascensores, le aporta a la empresa 29 años de experiencia en el gremio, sumamente útiles a la hora de asesorar al cliente.
OSLO es un homenaje pero también es un punto y aparte. La vieja generación se ha ido y el lugar lo han tomado estos empresarios más jóvenes pero igualmente expertos, que se introducen en el mercado con la idea de dar servicio, de ayudar: Se trata de estar listos para solucionar un problema, resolver una consulta, y tender una mano para sacar al cliente del apuro.
“Una de las ventajas que tenemos, porque yo lo he vivido en carne propia, es saber lo que sufre un ascensorista” afirma Daniel Guerriero.
El mecánico de ascensores es un mecánico diferente a todos, continúa Guerriero, es muy similar al mecánico naval, que se tiene que arreglar como pueda. El conservador va a trabajar a un edificio en Av. Del Libertador y no puede llevar un torno, una morsa, sólo lleva una cajita de herramientas y se arregla como puede. Nosotros vivimos eso y por eso queremos dar un servicio a ese operario que está trabajando en un lugar oscuro, sucio, difícil, y ayudarlo a que le sea lo más sencillo posible”.
“A nuestros clientes les ofrecemos ayudarlos en las urgencias. Si se les rompió la cerradura o un contacto y están complicados solucionando un problema en el edificio, nos mandan una foto, nos llaman por teléfono y no tienen que venir hasta acá, le mandamos en una moto el repuesto, soluciona el problema y listo”, explica Esteban López.
Además lo que hoy no se hace, es brindar el servicio que los partistas ofrecían antes: Reparar puertas, colocar cintas de frenos, componentes electrónicos y eso es lo que también hacemos en OSLO, comentan ambos socios.
REPUESTOS Y COMPONENTES
“Vendemos casi todos los productos del gremio. Todas las empresas fabricantes nos abrieron sus puertas, tenemos todas las marcas. Estamos muy agradecidos con todos los proveedores.
La empresa tiene su propio Instagram, OSLO ya cuenta con su página web www.osloascensores.com.ar y han contactado a muchos clientes y conocidos de ambos, y algunos que ya venían por tradición a la casa de repuestos que “estaba al lado de la terminal de colectivos” en Caldas 353, en el barrio de Chacarita.
FABRICACIÓN DE ASCENSORES
Esteban López que es técnico en automotores comenta que “Desde que nací estuve en una fábrica de ascensores, y hace 21 años que trabajo en el rubro”. Aprendió el oficio con su padre, y estuvo en QLD junto a él, fabricando durante 10 años para convertirse en poco tiempo en jefe de producción. Domina la soldadura, el plegado, el punzonado y el corte. OSLO fabrica chasis, hidráulicos y convencionales, rampas, marcos y hojas de puerta, plataformas salva escaleras, la cabina completa y monta vehículos. En resumidas cuentas se ocupan de todo lo que es carpintería metálica y herrería.
Si bien hay leyes que indican las medidas mínimas de un ascensor, no existe lo estandarizado, cada hueco tiene una medida y se fabrica a esa medida. Cada ascensor es un traje hecho a medida, por lo tanto, salvo ciertos productos, la mayoría de los ascensores se fabrica en base a cada obra puntual. Una vez que el hueco está terminado, revocado, se toman las medidas mínimas del hueco, y en base a esas medidas se fabrica el ascensor. “En la parte hidráulica el chasis puede llegar a ser estándar.
LA POLÍTICA DE OSLO
Esteban es enfático en el tema de la calidad: “Vamos a mantener siempre la calidad, quiero que me reconozcan porque vendo un buen producto, no porque soy barato.
Hay distintas calidades de productos, en el rubro todos se conocen, el tema es no poner en riesgo la de vida del usuario: Una contactora mejor o peor puede durar más o menos tiempo, pero no pone en riesgo al usuario, hay otros elementos que sí lo hacen.
Yo cuando comencé a fabricar, hace más de 20 años, lo hice con productos probados, tomé el ejemplo de mi padre que se formó en el viejo Guillemí, y luego fundó su empresa QLD, que estaba fusionada con una empresa española llamada Autür. Las puertas se fabricaban siguiendo normas europeas. Y desde allí fui forjando mi propio producto hasta el día de hoy. Nuestros productos están más que probados”.
Ambos socios se mantienen firmes en su política de venderle sus productos y sus servicios sólo a los conservadores e instaladores. “El venderle a cualquiera una cerradura, comenta Daniel, conlleva una responsabilidad legal, porque no sabemos quién va a instalar.
EL FUTURO
“Consolidarnos en el mercado como distribuidores, como así también consolidar alianzas con representantes en cada provincia.
Acá estamos para ayudarlos”.